Flauta

 

 Fundamentación:

La ejecución de un instrumento posibilita el encuentro con la música, haciendo viable el desarrollo integral de la persona como ser individual y social.

Objetivos:

Desarrollar, a través de ejercitación específica, habilidades técnicas para el manejo del instrumento.
Descubrir desde los primeros contactos con la flauta el placer de hacer música, ya sea en forma individual o en prácticas de conjunto.
Conocer los miembros de la familia de flautas dulces (soprano, contralto, tenor, bajo), como así también los de la traversa (piccolo, soprano, contralto o flauta en sol, flauta bajo).
Adquirir nociones del repertorio específico para flauta dulce y traversa, de la misma forma que de la música popular.

Niveles:

Dichos niveles estarán determinados por la capacidad y tiempo propio de cada alumno.

Nivel Inicial:

Reconocimiento del instrumento, su familia, las distintas partes que lo constituyen, su armado.
Control de la postura corporal (ejes de equilibrio involucrados en la ejecución, técnicas de relajación), digitaciones, ejercicios respiratorios elementales.

Nivel I:

Manejo de primera y segunda octava (flauta dulce o traversa) a través del reconocimiento auditivo (ejercitación de la memoria auditiva), el trabajo técnico (escalas, arpegios, distintas articulaciones, fraseo, dinámica, afinación), y la aplicación al repertorio.
Integración del trabajo corporal (ejercicios de relajación) a la interpretación musical.

Nivel II:

Afianzamiento del reconocimiento auditivo y de la técnica de ejecución.
Aplicación de dicho trabajo al repertorio flautístico, ya sean piezas para conjunto o para la interpretación individual.
Aproximación a distintos estilos musicales.

Nivel III:

Manejo de la tercera octava (flauta dulce o traversa), con la misma metodología con la que fueron incorporadas la primera y la segunda.
Incorporación de nuevo material musical, de mayor complejidad, con la integración del tercer registro al trabajo técnico, corporal y musical ya iniciado.